martes, 30 de diciembre de 2008

LA MEMORIA DE LOS SUCESOS II


FACTORES DEL TESTIGO

Actualmente no es posible realizar predicciones absolutas sobre qué testigos serán más precisos en determinadas tareas testifícales. Un testigo que muestra una buena ejecución en el recuerdo de un suceso puede no hacerlo tan bien en la tarea de reconocimiento. Debemos tener en cuenta que siempre existirá una interacción inevitable entre el tipo de tarea de memoria y el tipo de persona. Por ejemplo, un delito estresante puede afectar a un testigo ya de por sí nervioso. Un testigo más tranquilo y seguro no se verá tan influenciado y recordará mejor.

Edad

Algunos autores sugieren que la edad es la variable individual que afecta más al rendimientos de la memoria. Tanto los muy jóvenes como los muy viejos rinden peor que las personas de mediana edad. Investigaciones más recientes sugieren que mientras que los niños pueden ofrecer menos información que los adultos cuando se les pregunta por primera vez, realizar un interrogatorio delicado posteriormente a menudo proporciona tanta información como la que puede proporcionar el adulto medio. Aunque todavía persiste un cierto escepticismo, actualmente hay mayor tendencia a aceptar las evidencias aportadas por los niños.
En relación al testimonio aportado por las personas ancianas, existen algunos estereotipos en relación a su capacidad de memoria. Algunas personas (incluso el mismo sistema judicial) pueden creer que las personas mayores son testigos poco fiables que se confunden a menudo. Mientras que la evidencia disponible sugiere que algunas personas mayores rinden peor que los adultos jóvenes, esto no es, en absoluto, algo inevitable. En la sociedad occidental asistimos a un incremento progresivo de las población de personas mayores, lo que supone que cada vez más asistirán como testigos en los juicios. Sin embargo, el conocimiento que tenemos de la habilidad de las personas mayores para actuar como testigos todavía es incompleto.

Revisando la investigación reciente, Yarmey señala una serie de factores importantes que hay que tener en cuenta al valorar el testimonio de las personas mayores:

- El envejecimiento afecta tanto al oído como a la vista, por lo que las personas mayores pueden cometer más errores en la fase de adquisición de la memoria.
- Las personas mayores suelen necesitar más tiempo para integrar la información y tienen dificultades si su atención se divide en dos o más tareas.
Yarmey cree que las personas mayores pueden cometer más errores en la tareas de identificación y hacer más identificaciones falsas.


Por todo ello, Yarmey opina que no deberíamos rechazar simplemente a los testigos ancianos como grupo, sino que como, con el resto de testigos, valorar su credibilidad en términos de los factores personales y situacionales que puedan afectar a la precisión. La mayoría de las personas mayores muestran poco deterioro y su testimonio puede ser tan valioso como el de adultos jóvenes.

Yarmey propone una serie de técnicas que puede emplear la policía para ayudar a las personas mayores en su testimonio: no hacer preguntas tendenciosas, emplear entrevistas de estilo narrativo, reconocer que las personas mayores pueden ser más lentas al contestar y mostrarse más cautos; emplear ruedas de reconocimiento secuenciales para evitar las distracciones.


Trabajo

Se supone que grupos como la policía, vigilantes de seguridad, etc., serán más precisos y completos en su recuerdo de los hechos. Esta suposición ha sido respaldada por la investigación. Sin embargo, es más difícil encontrar evidencias de investigación que respalden la creencia de que los policías son más precisos en sus explicaciones de los sucesos.
Parte de la ejecución supuestamente superior de los policías puede ser solamente una cuestión de atención. Los policías suelen pasear por las calles con la tarea específica de buscar actividades delictivas o actos sospechosos. Los policías también prestan más atención a detalles específicos de la apariencia del sospechoso. Ya que una buena parte de su tiempo el policía lo pasa recogiendo información y recordando detalles, su ejecución puede parecer superior a la de los civiles en algunas tareas de memoria. Sin embargo, hay que tener presente que los policías son humanos y, como tales, están sujetos a todas las posibles distorsiones de la percepción y la memoria que se aplican al resto de las personas

Confianza

Una de las razones por las que los miembros de un jurado pueden convencerse más por el testimonio proporcionado por la policía es porque tiende a dar a estas evidencias más autoridad y confianza que a la de los civiles. Prestar testimonio en un juicio es una tarea rutinaria para el policía, con lo que pueden practicar el arte de “aparentar seguridad” en lo que dicen. Parecería lógico pensar que cuanto más seguro se muestre un testigo en su testimonio más preciso será éste. Sin embargo, no existe una relación lineal entre seguridad y precisión.
Existen evidencias de que incluso cuando los jurados conocen los múltiples factores que pueden afectar a la veracidad de un testimonio, todavía pueden dejarse influir por la seguridad con la que se da el testimonio.

Características de personalidad
La relación exacta entre variables de personalidad y la capacidad como testigo no es fácil de establecer. El único área en donde parece existir una cierta relación es con el rasgo de ansiedad o neuroticismo. Algunas personas tienen niveles de ansiedad menores que otras. Parecería razonable especular con que una persona muy nerviosa o abiertamente ansiosa será un testigo más pobre que una persona estable. Podríamos suponer que una persona nerviosa estaría tan preocupada por sus propios temas que apenas prestará atención a los acontecimientos del mundo exterior. Desafortunadamente es difícil establecer si esta conexión tan simple existe. Aunque algunos estudios han mostrado una ligera conexión entre el rasgo de ansiedad y precisión en el reconocimiento facial, es difícil decir si incluso estos ligeros efectos se aplican a la memoria. La revisión de la literatura al respecto indica que, aunque algunas variables de personalidad pueden ser relevantes, los efectos no son consistentes.
Una razón de por qué es difícil de cuantificar los efectos de las variables de personalidad es porque inevitablemente interactúan con factores del suceso, como la gravedad del delito. Los sujetos muy ansiosos o neuróticos pueden ser testigos pobres si son víctimas de un delito serio. Sin embargo, pueden ser mejores testigos si presencian (no están implicados) un delito menor. Por el contrario, una personalidad tranquila afrontará mejor el estrés de un ataque personal, pero puede no darse cuenta de un delito menor que ocurra al otro lado de la cale.

No hay comentarios: